Que yo quise estar a tu lado, pero algo extraño me impidió, el verte, y quise, embriagado en whisky, besar tus labios como la primera vez, empalmarme con tus caricias y sentir el placer de tu cuerpo rozando el mío.
Que da igual el nombre de la persona, que no importan fronteras ni etnias, que lo único que quiero es un poco de ese amor certero, de esa lucha de mi corazón contra la mente, de tanta gente que merece un suplicio, que no se da cuenta de su desamparo.
Un secreto a voces, escondido a plena vista y mostrando mis dotes a aquel que me toque. Muéstrame mis penas, dime lo que hice mal y ponme de beber una vez más…
...Borracho, escribo mejor las penas.
Leído cocina!!
ResponderEliminar